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sábado, 19 de noviembre de 2011

Sophia de Mello Breyner Andresen




En el punto

En el punto donde silencio y soledad
Se cruzan con la noche y con el frío,
Esperé como quien espera en vano,
Tan nítido y preciso era el vacío.

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión de Diana Bellessi
imagen: s/d



No ponto onde o silêncio

No ponto onde o silêncio e a solidão
Se cruzam com a noite e com o frio,
Esperei como quem espera em vão,
Tão nítido e preciso era o vazio.



Regreso

Quién cantará vuestro regreso muerto
qué lágrimas qué grito han de decir
la desilusión y el peso en vuestro cuerpo.

Portugal tan cansado de morir
sin interrupción y lentamente
mientras el viento viene del mar.

¿Quiénes son los vencedores de esta agonía?
¿Quiénes los señores sombríos de esta noche
donde se pierde muere y se desvía
la antigua línea clara y creadora
de nuestro rostro vuelto hacia el día?

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión © Gerardo Gambolini



Regresso

Quem cantará vosso regresso morto
Que lágrimas que grito hão-de dizer
A desilusão e o peso em vosso corpo.

Portugal tão cansado de morrer
Ininterruptamente e devagar
Enquanto o vento vem do mar.

Quem são os vencedores desta agonia?
Quem os senhores sombrios desta noite
Onde se perde morre e se desvia
A antiga linha clara e criadora
Do nosso rosto voltado para o dia?



Mediodía

Mediodía. Un rincón de playa sin nadie.
El sol en lo alto, denso, enorme, abierto,
volvió el cielo por completo el dios desierto.
La luz cae implacable como un castigo.
No hay fantasmas ni hay almas,
y el mar inmenso, antiguo y solitario,
parece batir palmas.

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión © Gerardo Gambolini



Meio-dia

Meio-dia. Um canto da praia sem ninguém.
O sol no alto, fundo, enorme, aberto,
Tornou o céu de todo o deus deserto.
A luz cai implacável como um castigo.
Não há fantasmas nem almas,
E o mar imenso solitário e antigo
Parece bater palmas.



Instante

Déjame limpio
el aire de los cuartos
y liso
el blanco de las paredes
déjame con las cosas
fundadas en el silencio.

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión © Gerardo Gambolini



Instante

Deixai-me limpo
O ar dos quartos
E liso
O branco das paredes
Deixai-me com as coisas
Fundadas no silêncio

martes, 18 de octubre de 2011

Sophia de Mello Breyner Andresen





Mi vida había tomado la forma de la placita
Aquel otoño en que tu muerte se organizaba meticulosamente
Yo me aferraba a la plaza, porque tú amabas
La humanidad humilde y nostálgica de las tiendas
Donde los empleados doblan y desdoblan cintas y telas
Trataba de ser tú porque tú ibas a morir
Y la vida entera dejaba allí de ser la mía
Trataba de sonreír como tú les sonreías
Al vendedor de periódicos al vendedor de tabaco
Y a la mujer sin piernas que vendía violetas
Le pedía a la mujer sin piernas que rezara por ti
Encendía velas en todos los altares
De las iglesias que hay al costado de esta plaza
Pues apenas abrí los ojos y vi fue para leer
La vocación de lo eterno escrita en tu rostro
Yo les pedía a las calles a los sitios a la gente
Que fueron testigos de tu rostro
Que te llamaran que deshicieran
El tejido que la muerte entrelazaba en ti

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión © Gerardo Gambolini
imagen: s/d


A pequena praça

A minha vida tinha tomado a forma da pequena praça
Naquele outono em que a tua morte se organizava meticulosamente
Eu agarrava-me à praça porque tu amavas
A humanidade humilde e nostálgica das pequenas lojas
Onde os caixeiros dobram e desdobram fitas e fazendas
Eu procurava tornar-me tu porque tu ias morrer
E a vida toda deixava ali de ser a minha
Eu procurava sorrir como tu sorrias
Ao vendedor de jornais ao vendedor de tabaco
E à mulher sem pernas que vendia violetas
Eu pedia à mulher sem pernas que rezasse por ti
Eu acendia velas em todos os altares
Das igrejas que ficam no canto desta praça
Pois mal abri os olhos e vi foi para ler
A vocação do eterno escrita no teu rosto
Eu convocava as ruas os lugares as gentes
Que foram testemunhas do teu rosto
Para que eles te chamassem para que eles desfizessem
O tecido que a morte entrelaçava em ti



Bajo el peso nocturno del cabello
O bajo la luna diurna de tu hombro
Busqué el orden intacto del mundo
La palabra no escuchada

Largamente bajo el fuego o bajo el vidrio
Busqué en tu rostro
La revelación de dioses que no conozco

Pero pasaste a través de mí
Como pasamos a través de la sombra.

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión de Diana Bellessi


Antinoo

Sob o peso nocturno dos cabelos
Ou sob a lua diurna do teu ombro
Procurei a ordem intacta do mundo
A palavra não ouvida

Longamente sob o fogo ou sob o vidro
Procurei no teu rosto
A revelação dos deuses que não sei

Porém passaste através de mim
Como passamos através da sombra



Éste es el círculo que trazo alrededor de tu cuerpo amado y perdido
Para que cercada seas mía

Éste es el canto de amor con que te hablo
Para que escuchando seas mía

Éste es el poema -engaño de tu rostro
Donde busco la abolición de la muerte.

Sophia de Mello Breyner Andresen, Portugal, 1919-2004
Versión de Diana Bellessi


Eurydice

Este é o traço em redor do teu corpo amado e perdido
Para que cercada sejas minha

Este é o canto do amor em que te falo
Para que escutando sejas minha

Este é o poema – engano do teu rosto
No qual busco a abolição da morte.